No sabemos si su intervención fue gravada en vídeo con algún celular, pero lo cierto es que poco faltó para que los abusadores británicos se rieran del empeño de la primer mandataria, lo real es que gozaron lo suficiente imaginando como nos están succionando el petróleo que nos corresponde por derecho.
"Pido por favor, reanudemos nuestras negociaciones por la soberanía de las Islas Malvinas conforme la Resolución de la ONU de 1965..." dijo
Como si esto fuera poco, no tuvo mejor idea que asimilar la Gesta de Malvinas con el gobierno del Proceso, como es la insana costumbre del progresismo argentino.
"Somos un país de paz, no se nos puede cargar con lo ocurrido durante la Dictadura militar, que nada ha tenido que ver con la idiosincrasia argentina..."
O sea que no forma parte de la forma de ser nuestra, luchar armas en mano por lo que en justicia nos corresponde.
Eso es solo atributo de la Dictadura.
Lo cierto es que nuestra presidenta pasó rodilla en tierra un buen rato.
Como sabia que debería iniciar esta nueva operación Gral Villegas, fue pertrechada con rodilleras Christian Dior.
Tristisimo.
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