En muchas películas se mostraban éstas carreras en los circos romanos del siglo I, con carros fantásticos tirados por 8/10 briosos corceles, guiados por un experto en el carro, que llevaba las riendas de cada uno de esas bestias enfurecidas.
Este conductor tenía tal habilidad que con la fuerza hecha en las riendas atadas a los frenos de boca de CADA UNA de las bestias, lo hacían invencible al conductor de esas carreras enloquecidas, SIEMPRE AL LÍMITE, Y A TODO O NADA, donde la derrota y la muerte era la compañera de carro.
Súper Néstor, con todas las riendas en la mano, el gran titiritero las llevaba siempre al triunfo, y si alguna bestia se descarriaba, hasta tenía la forma de anularla, usando alguna de las otras bestias, SOLTÓ PARA SIEMPRE LAS RIENDAS.
Pero El Gran Néstor murió, y las 10 bestias; Milagros Salas, D’Elía, Kunkel, Verbitzky-Garré, La Cámpora, Moyano, Hannibal Fernández, ministros, gobernadores, intendentes, sindicatos, politiquillos en pretendido ascenso, punteros políticos, lo que les pasa es que:
SE LES SOLTÓ LA RIENDA que firmemente las manejaba a gusto, esclavizaba violentamente, de gran carrero.
Ahora actúan independientemente; HOY YA HAY MUCHOS OFICIALISMOS buscando nuevas alianzas, y traicionando otras, pero todas sueñan sentarse en el carro y tomar todas las riendas del Gran Néstor.
Verbitzky ha logrado ser el “Rasputín/López Rega” de Cristina, que la tienen de rehén con la Garré, por ahora, (una falla en la seguridad bañada en sangre ES EL FIN) y está buscando sentarse en carro de todas la riendas, con el poder total, pero en las sombras.
El caos que pueden generar, puede llevar a: “Declarar el Estado de Sitio”, anular las elecciones porque el mensaje al pueblo es: “Nosotros con todos los Super Poderes necesarios, o el Caos” (es decir NOSOTROS O NOSOTROS), y así llegar a un gobierno castrista-chavista, cerrando los congresos.
Esto lo hizo Hitler, cuando siendo vicepresidente del anciano Hinderburg, hace incendiar por las juventudes Hitlerianas, el “Reisntag” el palacio de Senado Alemán, y echa la culpa a los comunistas.
Muerto Hinderburg, por Decreto QUE HITLER REDACTA Y FIRMA,
¡¡POBRE HITLER!!,
y porque ya no tenía parlamento por los malos comunistas,
¡¡No le queda otra cosa!! que nombrase Presidente Permanente de Alemania.
Así tomó el poder “Democráticamente el Fascismo Nazi”, y en ese camino vamos con Fascismo de Izquierda de Verbitsky/Garré/Cristina, y TODAS LA SEGUNDAS LÍNEAS DE GENUFLEXOS Y BOROCOTIZADOS.
Yuri Schimunick
(argentino N. y C.)
“...Creo yo, que Nunca hubiera podido hacer si la guerra contra el terrorismo el que de otra manera en la que se forma hizo...”
ResponderEliminar“...Yo formo la versión de realidad, que es las FF.AA., combatieron el terrorismo que, sin solución otra tuvieron...”
Señor,
Gracias por sus líneas y la reciprocidad de los sentimientos de estima por las amables palabras que me expresó. Yo creo que podemos discutir con calma y con mejores resultados que en un clima de conflicto.
Diré que no estoy totalmente de acuerdo acerca de su pensamiento actual. Sólo en parte, mínima.
En los años setenta, el terrorismo ha tenido lugar en otras partes del mundo, no sólo en el hemisferio sur, pero se luchó y ganó en el “Estado de Derecho”. Los ganadores, después de treinta años, aún están orgullosos y, con la cabeza alta, ostentan las condecoraciones, pero, por encima, con el pleno apoyo de toda la población.
Le envío como ejemplo las primeras quince líneas del documento Nunca Más, que es muy claro sobre esto concepto.
“…Durante la década del 70 la Argentina fue convulsionada por un terror que provenía tanto desde la extrema derecha como de la extrema izquierda, fenómeno que ha ocurrido en muchos otros países. Así aconteció en Italia, que durante largos años debió sufrir la despiadada acción de las formaciones fascistas, de las Brigadas Rojas y de grupos similares. Pero esa nación no abandonó en ningún momento los principios del derecho para combatirlo, y lo hizo con absoluta eficacia, mediante los tribunales ordinarios, ofreciendo a los acusados todas las garantías de la defensa en juicio; y en ocasión del secuestro de Aldo Moro, cuando un miembro de los servicios de seguridad le propuso al General Della Chiesa torturar a un detenido que parecía saber mucho, le respondió con palabras memorables: «Italia puede permitirse perder a Aldo Moro. No, en cambio, implantar la tortura». No fue de esta manera en nuestro país: a los delitos de los terroristas, las Fuerzas Armadas respondieron con un terrorismo infinitamente peor que el combatido, porque desde el 24 de marzo de 1976 contaron con el poderío y la impunidad del Estado absoluto, secuestrando, torturando y asesinando a miles de seres humanos…”
El único error es el nombre del General, que se escribe Dalla Chiesa, no “Della Chiesa”.
Estoy, sin embargo, a la espera de una respuesta posible.
Cordialmente,
Burvic
“...Creo yo, que Nunca hubiera podido hacer si la guerra contra el terrorismo el que de otra manera en la que se forma hizo...”
ResponderEliminar“...Yo formo la versión de realidad, que es las FF.AA., combatieron el terrorismo que, sin solución otra tuvieron...”
Señor,
Gracias por sus líneas y la reciprocidad de los sentimientos de estima por las amables palabras que me expresó. Yo creo que podemos discutir con calma y con mejores resultados que en un clima de conflicto.
Diré que no estoy totalmente de acuerdo acerca de su pensamiento actual. Sólo en parte, mínima.
En los años setenta, el terrorismo ha tenido lugar en otras partes del mundo, no sólo en el hemisferio sur, pero se luchó y ganó en el “Estado de Derecho”. Los ganadores, después de treinta años, aún están orgullosos y, con la cabeza alta, ostentan las condecoraciones, pero, por encima, con el pleno apoyo de toda la población.
Le envío como ejemplo las primeras quince líneas del documento Nunca Más, que es muy claro sobre esto concepto.
“…Durante la década del 70 la Argentina fue convulsionada por un terror que provenía tanto desde la extrema derecha como de la extrema izquierda, fenómeno que ha ocurrido en muchos otros países. Así aconteció en Italia, que durante largos años debió sufrir la despiadada acción de las formaciones fascistas, de las Brigadas Rojas y de grupos similares.
Pero esa nación no abandonó en ningún momento los principios del derecho para combatirlo, y lo hizo con absoluta eficacia, mediante los tribunales ordinarios, ofreciendo a los acusados todas las garantías de la defensa en juicio; y en ocasión del secuestro de Aldo Moro, cuando un miembro de los servicios de seguridad le propuso al General Della Chiesa torturar a un detenido que parecía saber mucho, le respondió con palabras memorables: «Italia puede permitirse perder a Aldo Moro.
No, en cambio, implantar la tortura».
No fue de esta manera en nuestro país: a los delitos de los terroristas, las Fuerzas Armadas respondieron con un terrorismo infinitamente peor que el combatido, porque desde el 24 de marzo de 1976 contaron con el poderío y la impunidad del Estado absoluto, secuestrando, torturando y asesinando a miles de seres humanos…”
El único error es el nombre del General, que se escribe Dalla Chiesa, no “Della Chiesa”.
Estoy, sin embargo, a la espera de una respuesta posible.
Cordialmente,
Burvic